domingo, 15 de julio de 2012

Consideraciones al momento de adquirir una nueva mascota: la forma en que afectará al perro o gato senil.



Cuando uno es propietario de una mascota senil es importante tomar en consideración la forma en que se verá afectada por la introducción de una mascota nueva. Los animales que han vivido mucho tiempo están acostumbrados a la rutina diaria y a la estructura social del grupo.

Para un gato viejo resultaría una verdadera tortura tener que soportar a un gatito con energía interminable y que en poco tiempo competirá por los mejores lugares para descansar, por el alimento, por atención, etc.  No sé si para los perros es igual o peor, ya que estos sí se consideran parte de la familia y tienen una posición jerárquica dentro de la estructura social de la misma. La llegada de un cachorro joven provocará inicialmente celos y luego un conflicto serio ya que el recién llegado intentará siempre dominar y ocupar un lugar más alto dentro de la manada.

Esto debe ser realmente estresante para ellos y es algo triste de presenciar. Lamentablemente es una práctica extremadamente común el que las personas adquieran a otro perro o gato cuando ven que no le queda mucho de vida a la mascota; el resultado es inevitablemente el mismo: sufrimiento.

Este problema se debe en primer lugar al desconocimiento de las personas sobre el comportamiento de los animales domésticos, y en segundo lugar por razones absurdas como que les dolerá menos si ya tienen al reemplazo viviendo con ellos, lo cual es una prueba más de que la mayoría de personas se preocupan más por sus propios sentimientos que por los de sus mascotas.

Otro caso común es que otra persona lleve al reemplazo, como sucede cuando la mascota senil es propiedad de una persona de edad avanzada y los hijos quieren hacer que sea menos dolorosa la muerte del gato o perro.

Una vez llega un gatito o perrito lo primero que sucede es que los humanos les prestan más atención, porque son bonitos juguetones, esto es normal que suceda. Luego el jovencito querrá jugar con en el viejito y éste no tendrá ganas o energía suficiente para mantenerse al mismo nivel. En unos meses el nuevo miembro de la familia intentará pasar sobre la autoridad de su hermano o hermana mayor y allí habrá más problemas. Finalmente, cuando el joven supere al viejo ya ocupará un lugar preferencial y se dedicará a hacérselo saber constantemente y sin misericordia. El resultado es que quien una vez fue el rey de la casa habrá dejado de serlo y tendrá que conformarse con ser segundo, no importa si a los ojos del humano sigue siendo el favorito, lo que importa aquí es lo que ellos sientan. A pesar de ser animales domésticos son parte de la naturaleza y la naturaleza, al igual que la vida, es cruel y despiadada todos los días.